El impacto del dióxido de nitrógeno en la calidad del aire interior
Los dos óxidos de nitrógeno más prevalentes son el dióxido de nitrógeno (NO2) y el monóxido de nitrógeno (NO). Ambos son gases tóxicos, siendo el NO2 un oxidante altamente reactivo y corrosivo.
En esta página:
- Fuentes de dióxido de nitrógeno
- Efectos en la salud asociados al dióxido de nitrógeno
- Niveles en los hogares
- Medidas para reducir la exposición
- Normas o directrices
- Recursos adicionales
Fuentes de dióxido de nitrógeno
Las principales fuentes en interiores son los procesos de combustión, como
- aparatos de combustión sin ventilación, por ejemplo, estufas de gas
- aparatos con ventilación e instalaciones defectuosas
- la soldadura
- el humo del tabaco
- calentadores de queroseno.
Efectos en la salud asociados al dióxido de nitrógeno
Perfil del Sistema Integrado de Información de Riesgos de la EPA para el dióxido de nitrógeno. (en inglés)
- El NO2 actúa principalmente como un irritante que afecta a la mucosa de los ojos, la nariz, la garganta y las vías respiratorias.
- La exposición a dosis de NO2 extremadamente altas (como en un incendio de un edificio) puede provocar edema pulmonar y una lesión pulmonar difusa.
- La exposición continua a altos niveles de NO2 puede contribuir al desarrollo de bronquitis aguda o crónica.
- La exposición a niveles bajos de NO2 puede causar:
- aumento de la reactividad bronquial en algunos asmáticos
- disminución de la función pulmonar en pacientes con enfermedad pulmonar obstructiva crónica
- aumento del riesgo a infecciones respiratorias, especialmente en niños pequeños
Niveles en los hogares
El nivel promedio de NO2 en los hogares sin aparatos de combustión es aproximadamente la mitad que al aire exterior. En los hogares con estufas de gas, calentadores de queroseno o calefactores de gas sin ventilación, los niveles interiores suelen superar los niveles exteriores.
Medidas para reducir la exposición
Ventilar las fuentes de NO2 al exterior y asegurarse de que los aparatos de combustión se instalan, utilizan y se mantienen correctamente son las medidas más eficaces para reducir la exposición.
(Estas son las mismas medidas que se utilizan para reducir la exposición al monóxido de carbono).
- Mantenga los aparatos de gas ajustados correctamente.
- Considere la posibilidad de adquirir un calentador con ventilación cuando sustituya uno sin ventilación.
- Utilice el combustible adecuado en los calentadores de queroseno.
- Instale y utilice un ventilador de extracción con ventilación al exterior sobre las estufas de gas.
- Abra los conductos de humos cuando las chimeneas estén en uso.
- Elija estufas de leña de tamaño adecuado que cumplan las normas de emisión de la EPA. Asegúrese de que las puertas de todas las estufas de leña encajan bien.
- Anualmente, haga que un profesional capacitado inspeccione, limpie y ponga al día el sistema de calefacción central (hornos, conductos de humos y chimeneas). Repare rápidamente cualquier fuga.
- No deje el coche en marcha dentro del garaje.
Normas o directrices
No se han acordado normas para los óxidos de nitrógeno en el aire interior. La ASHRAE y las Normas Nacionales de la EPA de EE. UU. para la Calidad del Aire Ambiental señalan 0.053 ppm como límite medio de 24 horas para el NO2 en el aire exterior.
Recursos adicionales
- Dióxido de nitrógeno "Seis contaminantes comunes" (en inglés) de la Oficina de Aire y Radiación de la EPA
- Contaminación del aire en interiores: Una introducción para los profesionales de la salud. (en inglés)
Ayuda a los profesionales de la salud (especialmente al médico de atención primaria) a diagnosticar los síntomas de los pacientes que podrían estar relacionados con un problema de contaminación del aire interior.