Adaptación al calor
Repercusiones nocivas para la salud
Las islas de calor pueden intensificar el calor extremo, tal como las olas de calor. Cuando una ola de calor golpea un área afectada por el efecto de isla de calor, los habitantes pueden sufrir enfermedades potencialmente mortales, tales como agotamiento causado por el calor e insolación. Los adultos mayores, los niños pequeños, las poblaciones de bajos ingresos, las personas que trabajan al aire libre y las personas con problemas de salud son las más vulnerables a estos impactos.
Muchas personas mueren a causa del calor extremo. Entre 1979 y 2010, el calor fue la causa subyacente o contribuyente de muerte de casi 8000 estadounidenses, con un pico en 2006, un año de olas de calor generalizadas y el segundo año más caluroso registrado en los 48 estados contiguos. Sin embargo, los gobiernos locales pueden tomar medidas para proteger a los habitantes durante un evento de calor extremo.
Por ejemplo, los funcionarios locales pueden establecer sistemas de alerta temprana y centros de enfriamiento urbano y crear conciencia sobre los factores de riesgo, los síntomas de las enfermedades relacionadas con el calor y cuándo y cómo buscar tratamiento. Contar con un plan exhaustivo de respuesta al calor que combine estrategias individuales con un enfoque integrado es una forma eficaz de proteger la salud de los habitantes. Los componentes de dicho plan pueden incluir pronósticos y monitoreo, formación y concientización, así como respuestas ante una ola de calor. La Guía para eventos de calor excesivo (en inglés) de la EPA proporciona información sobre las opciones típicas de notificación y respuesta que se deben incluir en un plan o programa de respuesta ante el calor.